Sin duda hoy es un día de la madre diferente, con suerte los que pueden están encerrados en la misma casa con su mamá al menos para poder dar un abrazo.
Pero hoy quiero llevar a reflexión que eso debería considerarse suerte y bendición en todo tiempo. Ya el Coronavirus nos da una lección más sobre el amor y el valor que debemos dar a nuestros seres queridos y en especial a la madre.
Algunos tal vez estaban esperando este 10 de mayo para hacer algo especial y su madre no alcanzó a llegar.
Muchos ya tendrían que haber caído en cuenta que no vale la pena estar esperando fechas para dar un presente, para hacer sentir bien a la mujer que les dio la vida.
Tampoco podemos hoy precisamente que la ponemos en riesgo, querer correr a sus brazos cuando el resto del año a penas llamamos y no damos importancia a sus necesidades. Mamá vale todos los días y siempre es la única que te acepta y ama sin condiciones.
Por eso hoy debemos hacer valer nuestro papel como madres y como mujeres. Somos mamás millenials y en cuarentena hemos terminado de comprobarle al mundo que somos multitasking.
Con una pandemia encima ya no importa si la mamá millenial ejercía una profesión o no, todas estamos cumpliendo hoy más que nunca el papel de madre, docente, enfermera, psicóloga, payasita, chef, ama de casa entre muchas otras la principal de todas: cuidamos de los nuestros.
Y sin importar si hay quien cuide de nosotros o no, nuestro deber es cuidarnos a nosotras mismas integralmente.
Cuando pequeños los hijos están bien si mamá está bien. Cuando grandes mamá está bien si los hijos están bien. Mamá debería estar bien siempre.
La única lección que nos deja lo anterior y la cuarentena es que ya debería ser tiempo que cada uno entienda que debe estar bien porque así debe ser.
Cada uno debe cuidar su ser, lo cuidamos del coronavirus tomando todas las medidas, hagamos lo mismo internamente dándole una buena sanitizada a todo lo que estorba. El bienestar empieza por dentro.
En ese sentido, quitémonos ya esa carga como madres de pensar que sólo la felicidad de los hijos importa y como hijos quitémosle a nuestras madres la carga de nuestro bienestar cuando es únicamente nuestra responsabilidad.
Mi admiración y mi respeto este día a cada mamá millenial del área de salud, del área alimenticia, financiera y del sector informal. Una oración por ellas que aún con angustia y miedo están combatiendo de frente esta crisis.
Una oración por todas la mujeres que están dando a luz o darán a luz en medio de la pandemia, que Dios bendiga su maternidad.
Que todo esto nos haga entender, que la vida sólo es hoy.
La vida no vuelve a ser igual después de ser madre y tampoco volverá a ser igual después de esta crisis, si entendemos y aceptamos eso hemos dado un gran paso. Somos millenial y estaremos dispuestas a adaptarnos a los cambios.
A mi mamá, todo mi amor.
Feliz día de la madre.
Serendipiteando por
Katya Sifontes de Guerra
