Nos encontramos precisamente en la Semana Mayor, importante tradición para el pueblo católico a nivel mundial y también para el comercio. Época de vacaciones para cristianos y no cristianos.
En ese contexto surge para muchos la interrogante: ¿A qué vino Jesús?
No hace mucho pasamos la navidad y reflexionamos sobre la razón por la cual Jesús vino al mundo y nos centramos en esa imagen de Jesús pequeñito acostado en un pesebre. Pero hoy no quiero referirme a ese episodio que para algunas personas solo marca un antes y un después en la línea del tiempo sino el momento en que Jesús, habiendo crecido, llega a Jerusalén y empieza su ministerio. ¿ A qué vino?
Esta semana, como todos los años sobran las contradicciones entre las principales religiones, especialmente en países como el nuestro donde la lectura, y aún más la lectura bíblica es deficiente y abundan comentarios de todo tipo que en vez de "unir" nos separan más, porque nuestra gente prefiere creer lo que un líder religioso alguna vez dijo, lo que vieron en las películas de Charlton Heston o lo que dicta la tradición, que buscar la VERDAD.
Hay católicos viviendo el cristinismo la única vez en el año , hay cristianos evangélicos criticando las procesiones y juzgando "lo equivocados" que creen que están los católicos, y que en esta era de las redes sociales utilizan esos medios para "santificarse" unos a otros por medio de indirectas ofensivas, habemos otros cristianos cómodos que observamos desde afuera porque algo nos impide seguir en el redil, está el otro resto de la población que solo sabe que tiene vacación y no sabe por qué...y ni hablar de otras congregaciones que por hoy no vienen al caso.
Pero el punto es ¿estamos cumpliendo el objetivo para lo que vino Jesús? ¿Somos cristianos?
Él vino a salvar lo que se había perdido (Lucas 19:10), vino a enseñar que todos los mandamientos en uno se cumplen:
“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Éste es el primer y mayor mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos penden toda la ley y los profetas.” – Mateo 22:37-40
El problema radica en que pocas personas sabemos realmente "como amar a Dios", "como amar a su prójimo y "como amarse a sí mismo" y que no se trata de hacer las cosas a medias o solo como nos conviene, sino que es un mandamiento interdependiente.
¿Cómo puedo amar a Dios? Juan 14: 15-31 dice: "Si me amáis guardad mis mandamientos". ¿Hay otra forma de amarlo? No. Todo el que diga que ama a Dios, pero no hace lo que él espera que hagamos, no le está demostrando amor.
¿Cómo puedo amar a mi prójimo? Entre muchas otras cosas: siendo misericordiosos y compasivos con TODOS sin importar la religión que profesa (Lucas 6:36), perdonando a TODOS recordando que "...perdona nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden..." (Mateo 6:1:12) es una condicional; no juzgando a los demás (Mateo 7:1-3) sea hombre, mujer, divorciada, católico, evangélico, homosexual, borracho, ladrón, promiscua, haragana, solterona...etc. A NADIE. Y muchas otras cosas cliché pero muy buenas como dar de comer al hambriento y al desposeído.
¿Cómo me amo a mí mismo?
No voy a extenderme en lo que consiste una buena autoestima, solo diré que es importante una buena autoimagen ya que fuimos hechos "a su imagen y semejanza" y el cuidado de nuestro cuerpo que es nuestro "templo" manteniendo buena salud física y mental en total equilibrio, es decir un grado razonable de amor y respeto por sí mismo en la misma medida aplicada para el prójimo o viceversa.
No podemos decir que amamos a Dios si no amamos a nuestro prójimo, no podemos amar a nuestro prójimo si no tenemos amor propio, porque entonces no tenemos nada que dar y si no tenemos amor propio estamos negando el amor de Dios.
En ese sentido, ser cristiano no es una etiqueta o el nombre de una iglesia, o debatir si la reforma protestante fue útil o no, o que cuál iglesia fue primero; ser cristiano es imitar a Cristo, seguir su ejemplo y valorar el enorme sacrificio que hizo en la cruz por salvar a TODOS...porque para eso vino y es lo que realmente se celebra.
¿Somos cristianos?.
Serendipiteando por:
Katya Sifontes de Guerra
